La Fundación Goya recupera y analiza un estudio sobre el pintor. El periódico de Aragón
El facsímil incluye el trabajo ´Goya. Su tiempo, su vida, sus obras´ del Conde de la Viñaza, publicado en 1887.
En 1887, el Conde de la Viñaza publicó uno de los estudios más imprescindibles para todo aquel que quiera abordar la obra y la genialidad del pintor aragonés Francisco de Goya. Lo tituló Goya. Su tiempo, su vida, sus obras y, ahora, más de un siglo después, la Fundación Goya en Aragón ha recogido el testigo de aquella biografía y estudio crítico (fue el primero que se publicó en español) y la ha reeditado en un facsímil que también incluye un punto de vista actual sobre el propio Conde de la Viñaza y su estudio elaborado por Jesús Rubio (catedrático de Literatura Española de la Universidad de Zaragoza). El propio Rubio, acompañado de Gonzalo Borrás; la directora de la Fundación Goya en Aragón, Ana Armillas y del viceconsejero de Cultura del Gobierno de Aragón, Juan José Vázquez, presentaron ayer la publicación en la sala Sinués del Paraninfo de la Universidad de Zaragoza.
"ES UN BOSQUEJO" "Un siglo después era necesario este estudio", explicó Rubio que destacó que ya el Conde de Viñaza indicó en su día que era "un esbozo, un bosquejo de lo que quería y creía que se debía hacer". Es por eso que el estudio del siglo XIX quiso introducir, razonó Jesús Rubio, "en el estudio de la vida y la obra de Goya una perspectiva crítica que lo rescatara de la visión romántica que arrastraba frutos de aproximaciones a su obra más imaginativas que documentadas". Sin embargo, afirmó Jesús Rubio, Goya. Su tiempo, su vida, sus obras acabó siendo un "libro paradójico ya que trató de rescatar a Goya de las lecturas románticas que se le venían haciendo, pero es a su vez un monumento historiográfico romántico a la memoria del pintor".
Así, el estudio de Jesús Rubio que ha titulado Cipriano Muñoz y Manzano, Conde de la Viñaza, biógrafo y crítico de Goya, está dividido en tres partes. La primera de ellas es una silueta biográfica del propio Conde de la Viñaza; la segunda es un análisis del método historiográfico que utilizaba y la tercera es un comentario sobre el catálogo de las obras de Goya que incluía el estudio del Conde de la Viñaza. Este libro contiene 132 páginas que incluyen "196 documentadísimas notas brillantes", explicó Gonzalo Borrás.
EXPERTO EN LITERATURA El mismo catedrático emérito de la Universidad de Zaragoza explicó que él como presidente del Comité Científico de la fundación, propuso el nombre de Jesús Rubio porque creía que "tenía que ser un experto en literatura y Rubio está muy especializado en las relaciones entre las artes plásticas y la literatura". De hecho, continuó, "el resultado me ha dado la razón ya que la revisión historiográfica que ha realizado, ningún historiador del arte la habría superado".
Rubio también dejó claro que el estudio del Conde de la Viñaza acerca de la figura del de Fuendetodos no se puede entender si no se entiende en el contexto en el que fue creado: "Sin ver su tradición y sus circunstancias resulta un libro envejecido y ajeno a la sensibilidad con que hoy se contemplan la vida y la obra del pintor de Fuendetodos, pero convenientemente contextualizado, tiene todavía interés, tanto por lo que dice como por lo que apunta".
Ana Armillas, por su parte, quiso destacar la labor de la fundación que preside ya que uno de sus objetivos es "el impulso de las actividades en torno a la figura de Goya y, por eso, pensamos que, además de hacer catálogos de exposiciones, había que abrir líneas de investigación, algo que ya hemos hecho con otras publicaciones y ahora hacemos con esta maravillosa edición, que recorre la vida de la figura de dos personas como son el Conde de la Viñaza y Goya".
Todos los ponentes de la mesa redonda del acto coincidieron en la importancia de la reedición de la obra del siglo XIX y la publicación del estudio crítico de Rubio para que la figura del aragonés Francisco de Goya sea todavía más conocida.