El Ballet Nacional habita el mundo oscuro de Goya. El País
El espectáculo, inspirado en los seres que poblaban la última etapa del pintor, se estrena en el Festival de Granada.
El Ballet Nacional de España estrena con motivo del 60 aniversario de los festivales de música y danza de Granada y Santander Negro-Goya. El Teatro del Generalife acoge esta noche la producción inspirada en el último y tortuoso periodo creativo del pintor. Negro-Goya quiere resaltar la intemporalidad y vigencia de su arte con una visión vanguardista alejada de "los tópicos y el folclore" para hacer una obra con "frescura y una estética muy actual", explica el director y coreógrafo del ballet, José Antonio.
La idea original del espectáculo, programado para el 5 de agosto en Santander, la empezaron a "pergeñar" Enric Palomar, compositor de la música, y José Antonio hace cuatro años. Se le da un tratamiento a Goya "muy diferente", para convertirlo en "un personaje intemporal". "Es un encuentro con lo contemporáneo a través de una sensación muy profunda de lo hispánico", explica Palomar. Inspirada en la serie Los desastres de la guerra, Negro-Goya recorre su última etapa con una tortuosa dicotomía entre la realidad y la fantasía.
"Goya fue el primer impresionista de su época y, a la vez, un cronista de avatares sociales y políticos de su tiempo", destaca José Antonio. Por eso, y por su grandeza artística, es un personaje "intemporal". El director siempre tuvo también la idea de que la magia desbordante de la plástica de la última etapa del pintor del siglo XIX era "susceptible de coreografiarse". La dramaturgia toma como última imagen su Duelo a garrotazos, prueba irrefutable de las dos Españas.
"Hemos querido traer la historia a una estética más cercana a nosotros porque, desgraciadamente, aún tiene vigencia. La obra es un pulso herido, un anhelo de un país mejor y las macabras visiones que Goya tiene ante la imposibilidad de conseguirlo", explica el coreógrafo. Goya está interpretado por Fernando Romero; mientras que Elena Algado, es Leocadia, el personaje que pisa tierra y ofrece un contrapunto de realidad a Goya, abstraído por sus monstruos. Miguel Ángel Corbacho interpreta al rey y Miguel Ángel Espino, al macho cabrío.
La dirección musical corre a cargo de Josep Caballé-Domenech, que dirigirá a la Orquesta Ciudad de Granada, mientras que el vestuario -todo artesanal y pintado a mano- ha sido diseñado, por Sonia Grande, quien recibió un Goya por La niña de tus ojos.