San Carlos exhibirá Los caprichos de Goya. El Universal
Integrada por 80 planchas realizadas a partir de 113 dibujos, la serie será expuesta a partir del viernes 13 de abril.
La sátira realista y crítica social que plasmó el artista español Francisco de Goya y Lucientes, podrán ser apreciadas en su serie "Los caprichos", que se exhibirá a partir del viernes 13 de abril, en el Museo Nacional de San Carlos.
La muestra, que podrá ser visitada hasta el próximo 25 de junio, está integrada por 80 planchas realizadas a partir de 113 dibujos preparatorios, que el artista inició en el año de 1796, y cuya primera edición se hizo en 1799, así lo informó el Instituto Nacional del Bellas Artes (INBA), mediante un comunicado.
El público podrá apreciar esta serie en la que predomina la sátira realista y crítica social, mientras que los vicios humanos dan forma al trazo de ácidas fisonomías bestiales que estigmatizan los prejuicios, imposturas, supersticiones e hipocresías consagradas en el siglo XVIII.
Entre los temas que fueron abordados en esta serie por el singular artista destacan, las órdenes religiosas, el sistema educativo y social, los matrimonios arreglados y la figura de La Celestina son algunos de los temas que no se salvaron de su diatriba.
Los grabados que conforman "Los caprichos" han sido considerados como los primeros españoles que tratan estampas caricaturescas, al modo de los que había en Inglaterra y Francia, pero con una gran calidad en el manejo de las técnicas del aguafuerte y el aguatinta, muy habituales en los pintores-grabadores en el siglo XVIII.
La obra gráfica de Goya comprende las series "Los Desastres de la Guerra", "La Tauromaquia", "Los Disparates o Proverbios", "Los Toros de Burdeos" y la más antigua y estudiada, "Los Caprichos".
El grabado más emblemático de esta serie, "Los Caprichos", es el que inicialmente iba a ser el frontispicio de la obra y en su publicación definitiva sirvió de bisagra entre la primera parte, dedicada a la crítica de costumbres, de la segunda, más inclinada a explorar la brujería y la noche y que da inicio con el capricho número 43, "El sueño de la razón produce monstruos".
Desde su primer dibujo preparatorio "Sueño 1º", de 1797, se representaba el propio autor soñando en una visión de pesadilla: su propia cara repetida junto a cascos de caballos, cabezas fantasmales y murciélagos.
En la estampa quedó la leyenda en el frontal de la mesa donde se apoya el hombre vencido, por el sueño que entra en el mundo de los monstros, una vez apagado el mundo de las luces.