"La condesa de Chinchón" recupera todo su esplendor
El Museo del Prado vuelve a exponer "La condesa de Chinchón", tras su reciente restauración. Gracias a dicha intervención se han recuperado los valores originales de la obra y es posible apreciar las magistrales pinceladas de Goya.
El pasado 23 de diciembre el Museo del Prado presentó La condesa de Chinchón de Goya, tras haber sido intervenida dentro del programa patrocinado por la Fundación Iberdrola España como miembro Protector del Programa de Restauración del citado museo.
La intervención, que fue llevada a cabo por la reconocida restauradora Elisa Mora justo antes de su jubilación, ha consistido en un proceso de fijación de la capa pictórica y de eliminación del barniz oxidado y de la suciedad acumulada en la superficie de la pintura. Así, gracias a la restauración se han recuperado los valores originales de la obra y es posible apreciar las magistrales pinceladas de Goya, cubiertas por un velo oscuro y amarillento que impedía captar la profundidad y el aire del espacio que envuelve a la figura.
La obra, documentada en el palacio de Godoy en 1800, fue trasladada en 1813 al Depósito General de Secuestros, situado en el almacén que la Fábrica de Cristales de San Ildefonso tenía en la calle Alcalá. En 1814, se sitúa en el palacio de Boadilla del Monte (Madrid) entre los bienes devueltos a la condesa de Chinchón y permaneció en posesión de sus descendientes directos hasta su incorporación a las colecciones del Prado, en 2000, gracias a la adquisición de la obra con fondos del Estado y una aportación del propio Museo Nacional del Prado procedente del legado de Manuel Villaescusa.