Figura masculina de espaldas, con una rama en la mano derecha y apoyada en un pretil

De nuevo estamos ante un dibujo académico en el que Goya representó una figura masculina de espaldas que, ataviada con túnica clásica y manto, apoya la pierna izquierda en dos escalones mientras el brazo derecho lo dispone en una especie de antepecho o pretil. Lleva el pelo recogido en un moño y sostiene una rama florida con la mano derecha a la vez que con la izquierda sujeta su manto. Según Cristina Monterde y Raquel Gallego, en este caso la túnica que cae por la espalda deja ver parte de la musculatura del personaje por lo que se intuye que Goya no sólo se ejercitó en la captación de los paños sino también en la anatomía del cuerpo humano. Seguramente esta figura fue copiada del natural en alguna de las grandes academias de Roma, o bien, al igual que en el caso del dibujo Sacerdote antiguo, semiarrodillado hacia la derecha, con los brazos extendidos y coronado de hojas (ca. 1771) de este mismo Cuaderno italiano, al aragonés le pudo servir también de ejemplo el lote de dibujos académicos a la sanguina conservado actualmente en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid y atribuido al escultor Felipe de Castro (ca. 1711-1775).